martes, 28 de febrero de 2017

Jugando con demonios

He jugado a quitarme trozos de piel para refugiarme del dolor; he vendido a un gran precio, convirtiéndome en alguien que nunca quise. He dañado e inconscientemente me he impregnado ardiendo en el infierno.
Cómo volver a ser yo sin ese recuerdo? Cómo no caer de nuevo en quitarme tiras de piel?
El diablo ha estado muy cerca de mí cuando más angustiado he estado; ha cambiado ira por placer y lo único que ha perdurado han sido cicatrices imposibles de olvidar. El deshonor ha calado muy dentro de mí. Me he convertido en mis propios miedos, me transformé sin saberlo en tiempos de antaño, cuando aquel vampiro arrancó mi corazon. Ahora soy yo el que aterroriza; me horroriza poder ver en lo que he acabado.
Ojalá pueda arrancar este trozo de mí, es algo que no me pertenece. Debo saber renovarme en momentos de lluvia, saber encontrar paz en los bosques, bañarme en las aguas del estanque estancado, y saber esperar tu llegada en la que te bañes junto a mí para quitar la piedra atascada, o simplemente encontrar el momento para salir del agua y descansar en la orilla contemplando la naturaleza, viendo cómo pasa la brisa del tiempo sobre este paisaje.
No más juegos falsos, no más destrozos en nuestro cuerpo.
Mi ser y el tuyo se merecen algo más puro.
Que descansen en paz nuestros malos recuerdos.

No hay comentarios: